Cuando habitamos en un espacio demasiado húmedo, si no padecemos alguna enfermedad respiratoria cuyos síntomas se agudicen en entornos húmedos, alergias o asma, es muy probable que identifiquemos la humedad como un problema en el momento en que aparecen manchas de filtración de agua en las paredes y un olor particularmente desagradable en toda la casa. Este aroma se impregna especialmente en la ropa, en la que además comienzan a notarse daños en los tejidos por la proliferación de moho que poco a poco consume las prendas, al igual que los muebles, los zapatos y libros.
En entradas anteriores hemos compartido algunos consejos para poder quitar la humedad de la ropa, de las paredes y también hablamos de cómo evitar el daño causado por la humedad en libros y otros documentos impresos en papel, especialmente mediante el uso de deshumidificadores. Esta ocasión daremos tips para poder deshacernos de la humedad en los zapatos.
Las manchas de moho en los zapatos son el resultado de permanecer mucho tiempo guardados en un lugar muy húmedo, por lo regular en armarios, o bien, porque en algún momento se mojaron y no se tuvo el cuidado de secarlos bien. La sudoración excesiva también puede ser un factor detonante pues la humedad propicia el desarrollo del moho en cualquier tipo de superficie. Una vez que se han presentado las manchas de moho es necesario emplear técnicas especiales para eliminarlas, restaurar el estado del calzado y una vez hecho esto, tomar medidas para evitar su reaparición.
Antes de aplicar cualquiera de las técnicas que describiremos a continuación es necesario que limpies tus zapatos, para esto utiliza un cepillo suave y un paño para retirar el moho de la superficie. Te recomendamos que no lo hagas dentro de tu casa y que tengas cuidado de desechar en la basura los restos que han caído de la superficie del calzado.
Para quitar el moho en zapatos de cuero, una vez que los has limpiado, tienes que eliminar el exceso de humedad. Te recomendamos que pongas los zapatos en un lugar donde les dé el sol para que se sequen de manera natural, o bien, puedes hacerlo con ayuda de una secadora de cabello utilizando el disparo de aire frío. Si después de que los has limpiado aún quedan algunas manchas puedes hacer lo siguiente:
- Mezcla vinagre blanco con agua en partes iguales. Frota la superficie del zapato con un paño humedecido en la solución haciendo movimientos suaves y ejerciendo poca presión. Retira los restos de la solución con un paño limpio y pon a secar los zapatos.
- Utiliza una solución de agua con alcohol en partes iguales. Limpia los zapatos con la mezcla ayudándote de un trapo o una esponja suave, retira los restos con un trapo limpio y seca el calzado.
Si tus zapatos son de gamuza al limpiarlos con el trapo o cepillito tienes que ir en dirección opuesta al pelo. Para eliminar las manchas de moho difíciles puedes usar una goma para borrar para frotar las manchas o bien, utilizar un limpiador especial para gamuza. Recuerda que es preferible no utilizar líquidos en este tipo de zapatos pues dañan el material.
Por otro lado, hay varias maneras efectivas para quitar el moho de los zapatos de tela y para elegir la mejor para cada caso, sólo basta con identificar el tipo de tejido con el que está fabricado el calzado. Te sugerimos lo siguiente:
- Mezcla bicarbonato de sodio con agua y un poco de jabón neutro. Para limpiar los zapatos de lona, en un litro de agua disuelve una cucharada de bicarbonato y jabón neutro; talla los zapatos con la mezcla y un cepillo de cerdas suaves haciendo movimientos circulares. Enjuaga con agua fría y ponlos a secar.
- Usa limón y sal. Forma una pasta con un poco de sal y dos cucharadas de jugo de limón. Aplica la pasta sobre las manchas de moho y deja que actúe durante dos o tres horas, posteriormente remueve la pasta con un cepillo de cerdas suaves, detergente y agua. Retira los restos del detergente con un paño húmedo y pon los zapatos a secar al aire.
- Haz una mezcla con vinagre blanco y bicarbonato de sodio para eliminar las manchas pequeñas. Deja actuar la mezcla sobre la mancha durante diez minutos y frota con un cepillito, posteriormente enjuaga el zapato y déjalo secar.
- Mezcla una parte de amoniaco por dos de agua. Frota las manchas con un paño fino humedecido en la mezcla. Seca la tela con ayuda de una secadora conforme avances en la limpieza. Esto funciona muy bien para los zapatos de raso pues la tela conserva su brillo.
- Utiliza un producto especial. Para quitar el moho de zapatos de telas delicadas lo más recomendable es que compres un producto especial y lo apliques según las instrucciones del fabricante.
Para evitar que el moho se desarrolle en tus zapatos te sugerimos el uso de deshumidificadores, que se encargan de eliminar el exceso de vapor de agua en el aire. Puedes instalar uno en el armario en el que guardas tus zapatos. Te sugerimos también que después de cada uso, y sobre todo, si tus pies transpiran mucho, o bien, en temporada de lluvias, seques los zapatos con un trapo por dentro y les coloques bolsitas de gel de silica antes de guardarlos. Otra de las maneras más eficaces para prevenir el desarrollo de moho es que asolees tus zapatos, ya que la radiación del sol mata a los hongos que producen las manchas de moho, esto te ayudará también a eliminar los malos olores.
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